Las calles de nuestras ciudades ya están adornadas, la televisión anuncia juguetes con mayor frecuencia, los villancicos están presentes en el hilo musical de muchas tiendas, y los centros comerciales cada día los vemos más concurridos. No hay duda, se acerca la Navidad, y es momento para hacer un balance del año.
Probablemente ha estado repleto de buenos momentos, de cambios positivos, de nuevas experiencias… pero podemos caer en un error: recordar los momentos más duros, las dificultades que hemos vivido, y acordarnos con más intensidad de los que no están o no pueden estar, de las pérdidas, carencias,… ya que estas son fechas también de nostalgia y añoranza. De hecho en estas fiestas aumenta número de casos con depresión, y la demanda de profesionales de la salud presenta los índices más elevados de todo el año.
Ejercicio de “balance de este 2015”
El equipo de Psicólogos Pozuelo os proponemos hacer un recorrido de cómo éramos en enero de 2015, y qué cosas han cambiado en nuestra vida, y por lo tanto en nuestra forma de ser. Está prohibido detenernos en las experiencias negativas. Tenemos que rescatar aquellos pequeños momentos que hemos disfrutado, esos detalles insignificantes que nos han robado una sonrisa pasajera, situaciones que nos han generado una sensación placentera, y nos ha ayudado a tener una mirada positiva.
“Para lograr la felicidad no son necesarios grandes cambios, sino pequeños detalles”
No hace falta coger papel y boli, pero os recomendamos que hagáis un breve recorrido de estos 12 meses y podáis rescatar “mis 3 mejores momentos”. No permitáis que la cabeza se detenga en los momentos negativos y las malas experiencias. Por un momento llenad vuestra mente de positividad, por un minuto, daros ese regalo. Seguro que habrá muchos otros recuerdos agradables que vuestra memoria selectiva no os permite ver ni recordar.
“Recordar buenos momentos nos ayuda a rescatar otros momentos que están en el olvido además de provocar experiencias positivas en el presente, y nuestro cerebro a su vez segrega dopamina, un neurotransmisor que genera sentimientos de felicidad”
Ahora intenta recordar qué hizo que esos 3 momentos fueran tan especiales: qué personas colaboraron para que así fuera, qué aportaste tú para que fuera un momento tan bonito, y qué cosas crees que puedes hacer para que en 2016 esos 3 momentos se repitan infinidad de veces. A veces no hacen falta acontecimientos importantes, ni costosos, ni grandes esfuerzos, sino poder poner una actitud de esperanza, entusiasmo y motivación en lo que vemos y hacemos.
Cómo hacer una lista realista de propósitos
Esas metas que, motivados por el inicio de una nueva etapa, nos proponemos llevar a cabo (dejar de fumar, perder peso, apuntarme al gimnasio, aprender inglés…), esas cosas que, normalmente, no cumplimos más allá de un par de meses.
Consejos prácticos para elaborar una lista de buenos propósitos:
- Los propósitos deben serlo por y para ti mismo: no tengas metas que quieren que consigas los demás. Es tu vida la que quieres cambiar, no la de los demás, ni se trata de complacer a otros.
- Los propósitos deben ser realistas: olvídate de los imposibles. No seas muy exigente, quizás no es el momento para algunos propósitos.
- Que sean pequeños objetivos, para que puedas sentir el éxito y satisfacción de haberlo logrado, y eso te motivará para tus siguientes retos, y contribuirá a mejorar tu autoestima. No tienes que conseguir todo el 1 de Enero, puedes fraccionarlo a lo largo del año.
- Los propósitos deben ser concretos: tienen que ser medibles, para que sepas si lo estás cumpliendo o no. Elabora un plan de acción para que te sea más fácil cumplir tus metas.
- Motívate y felicítate durante el proceso de cumplimiento del propósito. Solemos castigarnos, exigirnos y torturarnos cuando fallamos y olvidamos de premiarnos cuando obtenemos logros. Valórate por cada paso que vas consiguiendo. Hazte pequeños regalos con cada logro que alcances, y date mensajes de ánimo y motivación.
- Tienes que ser constante: resulta difícil conseguir un propósito, pero más difícil es mantenerlo, tienes que conseguir con motivación y voluntad no volver a rutinas pasadas. Una vez adquirido el hábito será difícil retroceder.
- Si fracasas… ¡No pasa nada!: puedes volver a empezar en cualquier momento… da igual que sea año nuevo o 10 de Marzo… lo importante es que quieres mejorar, cambiar algún aspecto de tu vida, y que puedes conseguirlo.
- Apóyate en los demás: los propósitos compartidos son menos duros. Te resultará menos duro si puedes compartir con esa persona cercana las dificultades del camino y os animareis el uno al otro. Comparte con los demás tus propósitos, los tendrás más presentes.
“Tú eres el protagonista principal de tu vida, disfruta el presente y no dejes de quererte”
Te deseo una salida de año llena de entusiasmo e ilusión, y que empieces el 2016 con esperanza y “pensamiento positivo”
Con afecto,
Mercedes Bermejo Boixareu
Directora Psicólogos Pozuelo